Hay que reunirse con los cantores tengan la fama que tengan

Por: Roberto Reyes (13 de marzo de 2012)

El sitio web Cubadebate ha publicado una entrevista que realizó la periodista Aday del Sol Reyes a Silvio Rodríguez. El título del trabajo reproduce la afirmación del trovador de que «hay que reunirse con los jóvenes, tengan la fama que tengan». Y aunque el enunciado es certero, al mismo tiempo es polémico, retador:

"Cantar en Casa, además de darnos la oportunidad de mostrarnos como artistas, nos dio un respiro como personas, como jóvenes, incluso como cubanos. En aquellos años algunos cuestionamientos podían ser devastadores. Para mí fue vital constatar que había dirigentes capaces de sentarse conmigo y escucharme, de conversar, de intercambiar ideas e incluso discutir. Aquello me fortaleció mucho. De aquella experiencia aprendí que los dirigentes, en cualquier época, debieran reunirse con los jóvenes, tengan la fama que tengan. Es muy importante formarse opiniones del trato directo y no de las versiones que se hacen de la gente." — Silvio Rodríguez | CubaDebate

Entre los jóvenes con los que «debieran reunirse, tengan la fama que tengan» se encuentran los trovadores, los roqueros y los raperos. Ellos, al igual que declara Silvio en una canción, han «preferido hablar de cosas imposibles, porque de lo posible se sabe demasiado». Y, justamente, por esta razón a algunos se les ha limitado —o negado— el acceso a las salas de concierto, los estudios de grabación, los espacios de la radio y la televisión o la prensa escrita.

Quizás hemos olvidado que Cuba pudiera ser o, más bien, debiera ser la meca de la música alternativa. Y es que durante medio siglo esta tierra caribeña ha proclamado su abierto desafío a los centros de poder en el mundo y se ha situado al lado de las causas nobles, dos de los pilares en los que se asientan las obras musicales más rebeldes del planeta. Sin embargo, con demasiada frecuencia surgen inoportunos prejuicios, incomprensiones y censuras.

No obstante, —y por fortuna— la tozudez de los jóvenes creadores los conduce a derribar barreras o, al menos, intentar sacudirlas. De ahí que surjan piezas como Melesio tenía razón de Frank Delgado y Buena Fe, Poder a la gente de la banda Chlover o Aldito el gusanito de Los Aldeanos.

A propósito, el dueto integrado por Aldo y el B no debe faltar en la lista de los jóvenes con los que «hay que reunirse, tengan la fama que tengan». Y este es un criterio que también sostiene Abel Prieto —hasta hace pocas semanas Ministro de Cultura—, quien recientemente declaró:

"Creo que los Aldeanos son gente revolucionaria, estuvieron en Estados Unidos y tuvieron una posición tremendamente consecuente. En su trabajo, como en el de otros raperos nuestros, hay una crítica social y ética que tiene que ver con lo que necesitamos discutir en Cuba." — Abel Prieto | El Blog de Vladia

Pudiéramos, entonces, parafrasear al autor de Ojalá y decir que «hay que reunirse con los cantores, tengan la fama que tengan».