Mayelin canciones como tributo

Por: Roberto Reyes (23 de mayo de 2011)

El azar convirtió en extraordinaria la reciente presentación de Mayelín Pérez en Santa Clara. Y es que la habitual peña que ofrece la cantante —el tercer viernes de cada mes— se distinguió, esta vez, por la atmósfera peculiar que le dieron dos sucesos: la inusual presencia de una imagen de la virgen de La Caridad del Cobre en el más importante teatro de la ciudad y el cumpleaños 80 de Marta Anido Gómez Lubián —promotora cultural y fundadora de la única academia de ballet con que ha contado Santa Clara—.

Después de cantar en la velada dedicada a la virgen, la vocalista se trasladó a la galería del Centro Provincial de las Artes Visuales, a pocos metros del parque Vidal —considerado el centro de la urbe—. En el salón más amplio de la institución, el público que la esperaba le dio la bienvenida con aplausos. Mayelín correspondió con una sonrisa y palabras de agradecimiento. El concierto lo dedicó a todas las madres y en especial a Marta Anido, quien se encontraba entre los presentes.

Aunque la trovadora no se apartó de su guitarra, la propuesta se enriqueció con otros instrumentos ejecutados por 4 excelentes músicos: un violinista, una flautista, un guitarrista acompañante y un percusionista. Este formato hizo que aflorara una Mayelín extrovertida, con pleno dominio de su voz y definitivamente abierta a sonoridades contemporáneas que le permiten revitalizar el son, la guaracha, la trova.

Entre los numerosos momentos emotivos que tuvo la noche, habría que recordar la interpretación de Silencio —hermosa canción del puertorriqueño Rafael Hernández— coreada por todos los presentes. También tendría que mencionarse la ternura que no pudo ocultar Mayelín al cantar Tu mirada, de Renael González. Del mismo modo sería necesario rememorar la recreación de la pieza Hoy mi Habana, en la que se percibió el agradecimiento de la cantante a una urbe que le ha abierto sus puertas y su espíritu.

Durante el concierto, Mayelín intercambió constantemente con el público. Con frecuencia se dirigió a Marta Anido —le dedicó varias canciones— y ésta le respondió con el rostro iluminado por la ternura. Entre las «travesuras» que hizo la trovadora estuvo la invitación a la cantante María de los Ángeles Santos para que la acompañara en la interpretación de Dos gardenias, de Isolina Carrillo, y 20 años, de María Teresa Vera. Los aplausos recibidos por el dúo confirmaron cuán acertada había sido la propuesta.

En los minutos finales, inmediatamente después de que la intérprete anunciara un popurrit de piezas de Miguel Matamoros, llegó desde el parque el eco de un coro multitudinario que despedía a la virgen. Mayelín hizo silencio, miró hacia los ventanales, y cuando las voces dejaron de oírse, comenzó a cantar un estribillo que todos repitieron: "Y si vas al Cobre, quiero que me traigas una virgencita de la Caridad...". Al terminar el espontáneo homenaje, la vocalista expresó: "Ahora sí le canto a Matamoros, y gracias a la virgen de La Caridad".

Quizás los gestos de veneración y respeto provocan ciertos reflejos en las paredes, porque de otro modo no pudiera explicarse por qué al terminar el concierto la galería del Centro Provincial de las Artes Visuales de Santa Clara pareció más iluminada que de costumbre.

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Mayelín Pérez - Variado:

1. Hoy mi Habana
2. Maridos majaderos
3. Realidad y fantasía (junto a Eduardo Sardiñas)
4. Si no fuera por ti
5. Sobre una tumba una rumba
6. Solo tengo ojos para ti
7. Tonada de amor